Todas las cosas que uno haga en la vida, deben estar llenas de pasión, debes hacerlas porque las sientas,
porque te llamen de tal manera que no importe en ellas la lógica, los intereses de los demás ni el futuro
cerniéndose como una sombra ; las cosas deben ser así, la simpleza de una pasión tan fuerte, como fuerte e
inexplicable es, su razón de simplemente ser, tener ese trasfondo profundo, real o ideal para ti, porque sólo de esa manera el hombre se pruba a sí mismo su capacidad de libertad, que ni siquiera tiene que ver con la libertad física, sino con la del alma, de la conciencia voraz que nos reclama o que por otro lado nos conduce más al conocimiento de nosotros mismosa cada batalla ganada, que no necesita ser la victoria ni el parámetro de sueños de otros, sino que es nuestra y nos pertenece tal, que aviva y da sentido verdadero a
nuestra voluntad de ser , de estar implícitos en nuestra propia obra de arte, como letras que a simple vista,
insignificantes y esparcidas, no simbolizan más que la tibia visión de un espectador cualquiera que tan no
pide nada de la vida, que se conforma con lo que es: simples ojos mirando la construcción de otras vidas menos la suya, ¿pero qué pasa cuando aquellas letras tan pequeñas tienen la determinación de ser algo más que simplemente gotas sobre el papel? ¿no está hecha así la poesía? ¿no se es literatura, obra de arte así?
A cada palabra, a cada frase bañada de simples letras que tuvieron el coraje de mezclarse perfectas y ser la
imagen de lo que siempre pudieron ser.
Y es que, el sueño es así de simple, tan fácil como cerrar los ojos, vivir despiertos y desear..
la vida sin sueños ni deseos por cumplir nos reduce a un estado de insensibilidad comparado con el de
una muerte prematura; y la vida, la espranza y yo, no estamos interesados en ceder.
Por ello vivo el sueño de soñar, más no aspiro sólo a ello, sino a ir más allá de ese letargo ideal, y disfrutar tanto de la realidad que me acompañe, que sea ésta la manifestación más pura de mis sueños hechos realidad.
"Sueños"..
.. manifestaciones de la vocación que nos ha reconocido precisamente a nosotros, de entre tantos que pudo
haber elegido, y no eligió.
ANAHÍ...
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